MINERÍA la mejor puerta de acceso al sector minero MINERÍA / FEBRERO 2022 / EDICIÓN 533 69 Quienes asistimos presencialmente por lo menos al último quinquenio de operaciones de la Cerro —en aquel tiempo quien escribe era integrante laboral de la empresa— sabemos de la no veracidad de muchos de los hechos mencionados sobre todo en cuanto a Salud, Seguridad y Saneamiento Ambiental de los campamentos mineros. En la parte resolutiva el tal decreto ley anunciaba: “Que, en uso de las facultades de que está investido [el gobierno] ha dado el decreto ley siguiente; Articulo 1. Declarase de necesidad nacional y de interés social la expropiación del negocio minero de propiedad de la sucursal en el Perú de Cerro de Pasco Corporation, Incorporada en el Estado de Delaware, de los Estados Unidos de América constituido por el Complejo minero metalúrgico con el cual opera en el país y todos los demás activos de dicha sucursal, entendiéndose como fecha de expropiación y toma de posesión del negocio por el Estado, las cero horas del día primero de Enero de 1974…”. Las cero horas del día primero de enero de 1974: he ahí el día y la hora final de la Cerro en el Perú. En las horas siguiente sucedieron sendas ceremonias trasmitidas por radio y por una incipiente televisión estatal con un nuevo vítor que luego quedó en el olvido: “Causachon revolucion”. Registremos lo escrito por Antenor Maraví Izarra5 asistente presencial a la ceremonia oroyina realizada frente a las Oficinas Generales de la fundición: “En una mañana lluviosa y cielo encapotado, en una ceremonia vibrante y emotiva que el país hizo suyo [sic] la transmisión en cadena por radio y TV, de este importante hito en defensa de la dignidad y soberanía nacional llevado a cabo el primer día del año 1974, en el que, el entonces ministro de Energía y Minas General EP: Jorge Fernández Maldonado, acompañado por tres representantes de las Fuerzas Armadas, entre ellos, el ministro de Comercio General FAP Luis Arias Graziani, recibió las llaves del complejo metalúrgico de manos del Gerente de Operaciones de la ex Cerro, Harry M. Allen, quien visiblemente nervioso ante las cámaras, firmó el acta de toma de posesión y entregó las llaves del complejo metalúrgico, al ministro Fernández Maldonado, quien a su vez, hizo lo propio a Jorge Díaz Arrieta, delegado de Centromín-Perú”, aunque en este momento Centromin fuese solo una entelequia, digo yo. Otro sí digo: Mr. H. Allen todavía quedó por algún tiempo al frente de la novísima Centromin. Luego como era natural y así lo demandaban las organizaciones sindicales encabezadas por el Sindicato de Empleados Yauli-Oroya —SEYO— y por el Sindicato de Trabajadores Metalúrgico Obreros, al que todo Oroya conocía como el “Glorioso y Combativo STMO”, amén de las otras 17 grandes organizaciones sindicales reconocidas legalmente y presentes en el acto (Recordemos que la Cerro poseía ocho minas, una fundición, refi6. La Oroya, 01 enero 1974. Local del STMO: Fernández Maldonado, pronuncia discurso luego de la toma formal de la CdeP CC.
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