29 AÑO 3 - Nº 94 / FEBRERO-MARZO 2022 Frick, Darius Ogden Mills y William Hearst James; los grupos Haggin Syndicate y JP Morgan) envían a las sierras peruanas a Alí Ben Haggin, un dinámico minero que mantenía importantes inversiones en Dakota y Montana. Él viaja directamente al Cerro de Pasco con el encargo específico de abrirles camino en la minería cerreña. Le precisan que debía comprar todas las acciones de la Cerro de Pasco Mining también de capital americano y ya instalada en el Perú. Para Haggin fue relativamente sencillo concretar el encargo y en un periodo muy corto logra con éxito su cometido, pues además de hacerse de esa empresa, compra a la compañía dueña del ferrocarril de La Oroya al Cerro e inicia un proceso contencioso para tomar el control legal de la Compañía Minera Backus y Johnston que mineraba en Casapalca y Morococha, lo consigue a precio conveniente debido a que la Backus trabajaba prácticamente a pérdida por la conocida y cíclica caída del precio mundial del cobre. Así fue como desde el año de 1897 Haggin indirectamente amplía las perspectivas de los mineros americanos afincados en el Cerro porque al potenciar sus capitales con los sindicatos americanos mencionados logra consolidar el Holding Cerro de Pasco Investment en Nueva York y cuyo corolario sería la creación Cerro de Pasco en 1900. Prístina Casa de Piedra, el inicial bastión de la Cerro de Pasco Mining. La Oroya en 1912. Primeras y fortificadas Oficinas Generales de la Cerro de Pasco Mining en Chulec —edificio del fondo— Luego este edificio y hasta 1973 sería el Chulec General Hospital.
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