60 Edición Semanal yacimiento. La comprensión de las características geológicas, la estabilidad del terreno y la interacción entre la roca y las estructuras subterráneas permite identificar áreas de riesgo y adoptar medidas preventivas para evitar accidentes y derrumbes. Monitoreo continuo: la colaboración entre áreas facilita la implementación de sistemas de monitoreo continuo de la estabilidad del terreno y otras variables críticas. El monitoreo en tiempo real proporciona alertas tempranas de posibles peligros, permitiendo tomar acciones preventivas antes de que ocurra un incidente. Planificación segura de operaciones: la coordinación entre geólogos, ingenieros mineros y metalurgistas es fundamental para planificar operaciones mineras seguras. La colaboración permite identificar zonas de riesgo, diseñar métodos de extracción y secuencia de trabajo dentro del procesamiento de minerales que minimicen la exposición a peligros. Gestión de aguas y control ambiental: la comunicación entre ingenieros geólogos y metalurgistas contribuye a una mejor gestión de aguas y control ambiental en la operación minera. Ya que el resultado de la separación y procesamiento mineral, trae consigo el desecho de minerales tóxicos. Coordinar la gestión de drenajes, la prevención de derrames y la mitigación de impactos ambientales reduce los riesgos de contaminación y daños en los ecosistemas. Lea el artículo completo aquí: https://t.ly/PzQPg Fuente: elaboración propia. Figura 4. Relación estudiante-profesional.
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