40 Edición Semanal con malas artes. La cultura en que predominan las buenas artes se conoce como una cultura desarrollada, en que priman la buena fe y la cortesía. Y aquella en que se imponen las malas artes se conoce como cultura subdesarrollada. Pasar de las malas artes al dolo es muy fácil, por lo que es básico fomentar el “juego limpio” (fair play) desde muy temprano. Los pueblos que favorecen los aspectos económicos a los valores morales corren el riesgo de saltar fácilmente a la dictadura y la prepotencia del poder. Las estrategias educativas deberían tener en muy alta consideración los sistemas que incluyan la organización colectiva que amerite la cooperación, el debate discrecional y argumentativo, la coordinación, el compañerismo, el diálogo y el trabajo en equipo. En los deportes, los campeones mundiales no solamente forman atletas, sino personas con valores morales muy altos. Una manera de encarar este importante esfuerzo educativo es crear una nueva organización obligatoria para los egresados de secundaría que, mezcla de escuela militar y escuela diplomática, se oriente a formar para el trabajo útil. Estas nuevas instituciones serían regionales, de un año de duración y de modalidad de internado. Existe ya experiencia en la construcción de patriotismo, que es un excelso valor moral, en el que se llega a sacrificar espontáneamente lo más preciado que se tiene, que es la vida misma. Con nuevos sistemas y métodos, el objetivo es la formación de ciudadanos íntegros, productivos y comprometidos con la verdad. Los antivalores que tientan, hoy en día, a esa multitud de jóvenes que terminan secundaria,
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