50 Edición Semanal expresarse de manera verbal y por escrito, tanto en español, como en inglés. Marcaron su vida varios personajes, además de mi madre, a quien adoró todos los días de su vida, a su padre Alberto Benavides Canseco, su abuelo don Ismael de la Quintana, y su madre, aunque la perdiera muy pronto cuando tenía 15 años. Don Eulogio Fernandini, primo de su madre, fue quien en sus visitas frecuentes al hogar de los Benavides de la Quintana le contaría de sus aventuras mineras y probablemente le trasmitió la emoción de minero al cortar una veta o descubrir un yacimiento. Robert P. Koenig (Bob), fue desde el inicio de su carrera en la Cerro de Pasco, su mentor. Siempre nos contaba que aprendió a fumar puros porque Bob cada vez que le presentaba un informe geológico le decía que para hablar de geología se requiere hacerlo con tiempo y, al fumar un habano, permitía discutir el informe sin prisa mientras se consumían los tabacos. Como lo menciona en sus escritos: Fritz Kruger, fue su primer jefe en la Cerro de Pasco, a quien siempre agradeció por sus enseñanzas. Kruger terminó su carrera como profesor de Geología en Stanford. Ulrich Petersen, su amigo entrañable, compartía sus teorías para encontrar la fuente de la mineralización, discutían donde se podría ensanchar la veta para que las soluciones hidrotermales depositen el mineral valioso. Lea el artículo completo: http://t.ly/PCbl0 Raúl Benavides.
RkJQdWJsaXNoZXIy MTM0Mzk2