MINERÍA Edición Semanal 294 | Del 29 de diciembre 2025 al 04 de enero 2026

30 Edición Semanal sumió en una crisis que incluyó la expropiación de la Cerro de Pasco Mining Corporation (Pasco) y de la Marcona Mining Corporation (Ica). El régimen militar no tenía capacidad para financiar el desarrollo de la industrialización en este sector y tuvo un mínimo efecto en la generación de empleo formal. En esos años la producción de cobre se redujo en 6.45% y la de hierro, en 42%. Las políticas de Velasco también disminuyeron la capacidad productiva y exportadora, y afectaron las industrias relacionadas con la actividad minera como son las de refinación, fundición y aleación. La recuperación del sector tomó más de una década y fue recién en los años 90 que, con la apertura del Perú al libre mercado y la privatización de las empresas mineras, se generó un ambiente favorable para la inversión nacional y extranjera que finalmente recuperó atractivo para esta actividad. Con la aprobación de la Ley General de Minería de 1992 se pudo captar inversiones para proyectos de exploración y explotación que permitieron al país llegar al siglo XXI con una minería lista para aprovechar un superciclo de las materias primas que trajo altos precios de los metales como el cobre. Fue así que en 2004, nuestro país se constituyó en el productor del 6% del cobre a nivel mundial, a la vez que produjo el 7% del oro y el 16% del zinc. En el caso de la producción cuprífera, fue determinante el aporte de las minas como Antamina (Áncash), BHP Billinton Tintaya (Cusco) y Southern Perú (Moquegua y Tacna), que, entre 2000 y 2004, tuvieron incrementos productivos de 38.5%, 129.55% y 6.1%, respectivamente. Respecto a la producción de oro, el incremento se produjo principalmente gracias a la mayor extracción del mi-

RkJQdWJsaXNoZXIy MTM0Mzk2