MINERÍA la mejor puerta de acceso al sector minero MINERÍA / ABRIL 2024 / EDICIÓN 559 65 sometido y muerto Atahualpa en Cajamarca los conquistadores españoles enrumban al sur buscando un lugar propicio para consolidar un centro administrativo y, luego de no pocas disputas por el botín, lo establecen en la ciudad de Reyes, hoy Lima, donde a resultas de un complot almagrista, luego de numerosos hechos de sangre, sobreviene la muerte de Pizarro el 26 de junio 1541. Los victoriosos nombran a Diego de Almagro, el Mozo, como gobernador del Perú. A Lima llegaron nuevas del sur confirmando la quimera referida a una ciudad de la nación de los ingas donde se habrían refugiado las familias de ese linaje y, por ende, dedujeron que allí también habría oro. Deciden conquistarla y buscando la mejor manera de llegar a tan ansiada ciudad trepan los montes subiendo a Xauxa y continúan luego a Huancayo, desde donde ascienden la cuesta de Parcas y llegan al pueblo de Vilcas, allí reposan unas semanas. Retoman camino y amanecen en Guamanga, tocan Andahuaylas y finalmente alcanzan Cusco, su meta. Con la misma ansia de oro otra partida sale de Lima hacia el sur, pero esta vez por la costa y bordeándola llega a la Chincha, allí son puestos al corriente por los naturales que en sus serranías hay ricas minas de oro y, entonces, impelidos por su codicia, ascienden y en 1559 llegan a Guando y Acoria donde los naturales los agasajan, les confirman lo de las minas e inclusive los acompañan a seguir subiendo a Chonta, llegan en 1560. Aquí el grupo de naturales desbanda temeroso de la gente de las alturas, pero antes les recomiendan seguir hacia el noroeste para lograr su meta: el imponente cerro de la Chacllatana. Los godos, solos, luego de mil y una penurias en arduo y penoso ascenso ubican a 6 millas de allí los altos montes de Guancavilca sitio donde para finales de 1562 don Amador Cabrera habría de llegar para instalarse y tomar posesión en nombre del rey español. Un año después y ya de pleno derecho, don Amador residía en la actual Huancavelica que oficialmente sería fundada después por don Francisco de Angulo a nombre del virrey Francisco de Álvarez el 4 de agosto de 1571 y solo a media legua del sitio donde originalmente llegaron. Para mayor jurisdicción Real la refundaron con el nombre de Villa Rica de Oropesa, y lo hicieron así porque el virrey en ciernes era hijodalgo de la casa del Conde de Oropesa en España. La minería colonial española en nuestras tierras no explotó minerales de “escaso” valor como cobre o fierro, ya que más a cuenta les salía traerlos de la metrópoli. Su objetivo principal siempre fue el oro y, a falta de oro, plata. Cuando hallaron las innúmeras minas, surgieron problemas para obtener esos metales por1. Antiquísima Iglesia en la mina Santa Bárbara. Allí, en 1570 ya se veneraba a la santa.
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