498 MINERIA MARZO

MINERÍA / MARZO 2019 / EDICIÓN 498 54 www.mineriaonline.com.pe como resultado de la escasez producida por la Guerra Civil en los Estados Unidos. El 15 de enero de 1861, el Congreso peruano promulgó una legislación que permi- tía la introducción de los denominados colonos asiáticos, con la intención de que sirvieran como sirvientes domésti- cos o como peones en las propiedades de los poderosos hacendados” . El talante del chileno, quizá con conocimiento de cau- sa, dramatiza el destino de estos nativos: “Mientras la mayoría de los raptados o reclutados no fueron tratados brutalmente durante el viaje al Callao, “la puerta del infier- no”, muchos de ellos cayeron víctimas de enfermedades. En tierra, el asunto se puso peor… Un período de trabajo por deudas en el Perú “era equivalente a una sentencia de muerte”. Sesenta y cinco por ciento de quienes desem- barcaron murieron de enfermedades pulmonares o intesti- nales, mientras un sexto pereció de viruela” . En adición, de esta migración forzada los chilenos dicen que inclusive los rapanuis fueron forzados a pelear contra Chile en la guerra del 79, leamos el relato de Moreno Pakarati: “Quizás por la misma razón, las histo- rias de rapanuis participando en una guerra contra Perú (menos de 20 anos después de estos raids) se mantienen con vigor hoy en día en una Isla mucho mas globalizada. En cualquier caso, es importante recordar que algunos de los nativos rapanui expatriados siguieron una nueva vida en Perú, incluso formando familias en algunos casos. Así, los rapanuis con familias peruanas se encontraban en el frente enemigo de Chile durante aquellos años entre 1879 y 1883, aunque es difícil determinar si tuvieron algún tipo de participación en el conflicto mismo” . Pero la dramatización de Moreno Pakarati, toca sum- mum cuando narra que “La tradición oral nos cuenta que durante la batalla por la toma de Lima en 1879 , (sic) [la toma de Lima fue en 1881] entre las tropas chilenas se encontraba un soldado rapanui y en el asalto a una trin- chera se encontró con un compatriota moribundo a quien alcanzo a contarle que su familia aun vivía en Rapanui y luego de abrazarse, lloraron y el isleño murió en brazos de su compañero” . De una u otra manera los chilenos recién llegados, por ser extraños a nuestra idiosincrasia territorial, sufrieron con mayor rigor las plagas de malaria y verruga en los valles interandinos por donde se construía el camino de fierro hacia nuestras minas y, por tanto, no diré que fueron diezmados, pero sí, hubo más muertos entre ellos que en nuestros nativos aclimatizados al embate de esas plagas. Otro sí digo, que los rapanuis trabajasen en la cons- trucción de las vías del FFCC no está documentado, pero igual el invasor se vale de esa hablilla para potenciar su furia en la destrucción de Lima y otras ciudades del nuestro Perú. La papa a la huancaína Para finalizar esta saga sobre hechos conexos a la construcción de nuestro histórico FFCC, aquí una atingen- cia breve sobre este peruanísimo potaje. La papa a la huancaína, y no papa huancaína, es otra de las “conse- cuencias” de la construcción de las vías del FFCC. Hemos referido que la obra se detenía frecuentemente por varios motivos, plagas, enfermedades, guerra. Pero uno de los mayores intervalos de para en tiempos de paz, fue el de 4. FFCC llega a Jauja. A su derecha mulas y cristianos cruzan un puente colgante, el futuro puente Stuart.