REVISTA MINERÍA 540 | EDICIÓN SEPTIEMBRE 2022

MINERÍA la mejor puerta de acceso al sector minero MINERÍA / SEPTIEMBRE 2022 / EDICIÓN 540 103 fundamentan en el tipo de roca y en la estimación del factor de resistencia GSI. Dado que el valor del GSI se basa en evaluaciones subjetivas del macizo rocoso, a menudo se da como un rango. Pueden justificarse ajustes significativos de los valores m y s si se varía el valor del GSI utilizado para el diseño con el fin de ajustarlo al comportamiento observado. Este es un enfoque efectivo para la calibración del modelo, sin embargo, como las condiciones de la roca varían, puede ser necesaria una calibración adicional del modelo. Pautas para el diseño de tajeos La recopilación de datos para la caracterización del macizo rocoso es uno de los primeros pasos en el proceso de diseño de tajeos. El ingeniero o geólogo que recolecte estos datos no debe limitarse a la data para un solo método de caracterización, ya que esta la vinculará a un método de diseño que puede no ser adecuado. Como se ha mencionado, el método de diseño utilizado tiende a determinar el modo de falla que se interpretará. La Tabla 2 muestra un ejemplo de los datos que deben recopilarse para la caracterización de la roca de cara al diseño de un tajeo abierto. El valor Q' evalúa los datos de las propiedades del conjunto de juntas críticas para el diseño. El valor RMR76´ utiliza un promedio de separación de conjuntos de juntas y el valor GSI es el rango dentro de un segmento de un gráfico GSI. La mitad superior de la Tabla 2 muestra los datos y observaciones que deben hacerse. Las correlaciones que relacionan la condición y la separación de las juntas con los valores de la clasificación Q' provienen de la literatura (Milne et al., 1998). Es fundamental estimar el modo de inestabilidad del tajeo antes de realizar su diseño. Con una amplia calibración, la mayoría de los métodos de diseño suelen predecir correctamente el comportamiento del macizo rocoso, aunque el modo de falla no sea el adecuado. Las condiciones cambiantes requerirán una recalibración frecuente si el modo de falla diseñado no es el adecuado. En condiciones de alto esfuerzo o de rotura, es necesario realizar una modelación basada en la resistencia y el esfuerzo utilizando el sistema GSI. En el caso de los techos de los tajeos con poca tensión/relajados, en los que el tamaño del tajeo con respecto a la dimensión del bloque es probablemente crítico, los métodos de diseño empíricos como el RMR76´, el gráfico de estabilidad y los enfoques del gráfico de dilución serán probablemente claves (Potvin, Y., 1998); (Clark, L., 1998); (Capes, 2009); (Wang et al., 2003). Otro enfoque que debería seguirse es el de estimar las propiedades que influyen en la falla del tajeo, basándose en casos prácticos y observaciones. Si el diseño del tajeo parece ser sensible a los cambios en el esfuerzo máximo inducido, conviene concentrarse en los enfoques de moIn numerical modelling techniques, stress driven failure is often assessed based on rock mass proper- ties such as m and s, which are based on rock type and the estimate of the GSI Strength Factor. Since the GSI value is based on subjective assessments of the rock mass, it is often given as a range. Signifi- cant adjustments to m and s values can be justified based on varying the GSI value used for design to fit with observed rock mass behaviour. This is an effec- tive approach for model calibration, however, as rock conditions vary, additional model calibration may be required. Guidelines for Stope Design Collecting data for rock mass characterization is one of the first steps in the stope design process. The en- gineer or geologist collecting this data should not be limited to data for a single characterization method, as this will tie them to a design method that may not be appropriate. As mentioned, the design method used tends to determine the failure mode that will be interpreted. Table 2 shows an example of the data that should be collected for rock characterization for open stope design. The Q’ value assesses data from the properties of the joint set critical to design. The RMR76´ value uses an average joint set spacing and the GSI value is the range within 1 segment of a GSI chart. The top half of Table 2 shows the data and ob- servations that need to be made. The correlations linking joint condition and spacing to the Q’ classi- fication values are from literature (Milne et al., 1998). Estimating the mode of stope instability before conducting your design is critical. With extensive calibration, most design methods will often predict rock mass behaviour correctly, even if the failure mode is not appropriate. Changing conditions will require frequent re-calibration if the failure mode designed for is not appropriate. In high stress or bursting conditions, strength – stress based modelling using the GSI system is needed. In cases of low stressed / relaxed stope hanging walls, where the stope size to block size is likely critical, empirical design methods like the RMR76´ span design, the stability graph and the dilu- tion graph approaches will likely be key (Potvin, Y., 1998); (Clark, L., 1998); (Capes, 2009); (Wang et al., 2003). An additional approach that should be followed is to estimate the properties that influence stope failure based on case histories and observations. If stope de- sign appear sensitive to changes in the maximum in- duced stress, concentrate on numerical modelling approaches looking at stress. If RQD appears to in- fluence stability, use a characterization method that

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