Ernesto Baertl 196 197 Prueba para sabe Galloa las alturas deAtacocha, donde lograronesconderlo enuna choza de pastores hasta que amainara el tumulto. Así estuvo escondido un tiempo, sin nada que hacer, dedicándose a caminar por esos páramos, hasta que undía de buena suerte descubrió la existencia deminerales de oro y zink. Pasado un tiempo se vino a Lima y con el doctor Quesada, unabogadomuy importante de la época, yEdgardoPortaro registraron los denuncios correspondientes. De ese modo nació Atacocha, una mina importante que abrió en la época de la SegundaGuerraMundial, circunstancia que demandó mucho mineral a buenos precios. La relación con el grupo Hochschild comienza con mi padre y se remonta a las épocas en que don Mauricio venía al Perú con el deseo de ingresar en el negocio minero. Don Mauricio ya había sido un rey de la minería en Bolivia, y cuando vino al Perú tomó la decisión de asociarse con grupos peruanos para poner enmarcha sus proyectos. Así organizó Caylloma, Condoroma y Arcata, llamando a los grupos de doña Angélica de Osma, de don Alberto Brazzini y al grupo de mi padre. Por esa razón comencé a trabajar con ellos, aunque inicialmente solo iba a visitar las minas. Arcata y Caylloma eran de plata y quedaban en el Departamento de Arequipa, Acarí en la Provincia de Nazca y producía cobre. Arcata estaba en la etapade exploración, desarrolloyde construcción de la concentradora. Para llegar eran diez horas de camino desde Arequipa, pues no había carreteras, ni siquiera trocha. Mi padre hacía antes tres días a caballo entre Huancayo y Huancavelica, así que diez horas en Jeep parecían casi nada. Ahora hay una pista de aterrizaje en Orcopampa, al lado de la mina. DonMauricio todavía vivía en París y cuando venía al Perú se alojaba en el Country Club, donde nos reunía a los tres grupos y, como un paréntesis durante esas jornadas, siempre traía un mago para entretener a sus amigos. El vivía en París y tenía un hijo con el cual nunca se pudo entender. Finalmente logró llegar a un acuerdo con él y, cuando murió, ya en los años ochenta, en París, su sobrino Lucho quedó a cargo de todo lo que era la participación Hochschild en el Perú. Yo era un asesor que visitaba la mina. DonMauricio había creado una organización que tenía intereses en el Perú, Chile, Brasil y otros países. Esta organización estaba dirigida por un consejo de administración formado por cuatro personas y, siguiendo la instrucciones del fundador, lafilosofía era que las utilidades que se obtuvieran se reinvirtieran. Por eso era una organización en crecimiento permanente. Don Mauricio nunca vivió en Lima. Tuvo residencia mucho tiempo en Bolivia, luego en Chile y, finalmente, en París. ALima solo venía de visita por unos días. Tenía un fuerte acento alemán y un carácter tan severo como su acento. Además de producir, el gran complemento de su organización era la comercialización de los minerales. Aquí existían otras comercializadoras, Grace tenía un departamento de compra, estaba Minerco, la misma Cerro de Pasco, peroningunode nosotros era comerciante. Lo que queríamos era hacer producir los tesoros que Dios había puesto en los Andes. Para bien o paramal, teníamos otro concepto, otra filosofía de la vida y del trabajo.
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