MINERÍA la mejor puerta de acceso al sector minero MINERÍA / NOVIEMBRE 2022 / EDICIÓN 542 109 see lágrimas, así como acompañantes alados con similares elementos. Opinan que el llamado Dios de los Báculos no es la exhibición de una personalidad sino que han recreado un mito del principio, siendo representado en variadas formas; esta divinidad no logra sobrevivir luego del ocaso de los estados Tiahuanaco y Wari. Cerro Baúl fue el lugar más aproximado entre las poblaciones de Tiahuanaco y Wari, el cual está ubicado en el distrito de Torata, provincia de Mariscal Nieto, a unos 12 km. al norte de la ciudad de Moquegua, a una altitud de aproximadamente 2,400 msnm. En la ladera del cerro Baúl, antes de las invasiones de los Wari y de los Tiahuanaco, existía un centro ceremonial para venerarlo, estaba compuesto de muros de piedras y de adobes, los cuales rodeaban a tres plazas rectangulares. Hacia el año 500 d.C. desde Taipicala, capital de Tiahuanaco, disponen incrementar sus tierras de cultivo e invaden muquihua, su asiento principal fue en Omo. Más tarde hacia el 600 d.C. desde Huari, capital de Wari, disponen intervenir el lugar, situándose en la parte alta del valle, su asiento principal estuvo en el ahora llamado cerro Baúl, siendo su objetivo principal: el control y la explotación de los yacimientos mineros. Para lograr un aumento de la producción de maíz, coca y ají, entre otros, los Tiahuanaco invaden en forma pacífica y con personal experto en tareas agrícolas, como los Colla y Pucara, los valles cálidos del oriente y del occidente de los Andes. En el valle de muquihua se instalarían en la margen oriental, cercano a las fuentes hídricas, compartiendo el lugar con los Huaracane, con quienes ya tenían intercambios comerciales, especialmente en piezas de cerámica y en textiles. Una segunda invasión por parte de Tiahuanaco se produciría años más tarde, logrando mayor expansión en tierras de cultivo, en Omo construyen un adoratorio a su deidad. Omo, fue declarado en el 2000 como Patrimonio Cultural de la Nación. La presencia de Tiahuanaco en la región, obligaría a los Wari a posesionarse del cerro Baúl, como lugar defensivo, además en su Dios de los Báculos: Wari – Tiahuanaco.
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