Entre las actividades de gran relevancia, por su impacto ambiental y social, en el sector minero peruano, destacan la adecuada gestión de los pasivos ambientales, así como el desarrollo de un cierre de minas progresivo, que garanticen que las zonas disturbadas por la minería sean debidamente rehabilitadas y puestas en valor.Según cifras oficiales, en el país existen más de 6,000 pasivos ambientales mineros, de los cuales casi el 50% no tienen identificado a un responsable para su remediación, lo que no contribuye a mejorar la imagen del sector y requiere de una atención primordial y priorizada con participación tanto del Estado como del sector privado.En ese sentido, es fundamental que desde el Estado, que si bien cuenta con una empresa especializada para la remediación de pasivos, se implementen incentivos para que las compañías privadas asuman de manera creativa esta labor y puedan, como sucede en otros países mineros, no solo controlar las emisiones de contaminantes sino transformar los pasivos ambientales en activos que hasta pueden generar ingresos para las comunidades.Existen experiencias internacionales que han convertido a antiguas operaciones mineras en museos, centros para desarrollar actividades deportivas y lúdicas, y hasta en alojamientos de primer nivel, entre otros, lo que es una muestra de lo que podríamos hacer en el Perú con una legislación adecuada que no aleje al sector privado de estas tareas sino, por el contrario, lo haga ser parte de la solución, de acuerdo a las características de cada zona.En lo que concierne al cierre progresivo de las unidades mineras, llama la atención que, en el Perú, con amplia tradición minera, a la fecha no se haya entregado ningún certificado de cierre definitivo, habiendo comprometidos más de US$ 10 mil millones en garantías para alcanzar este objetivo.Eso demuestra que la legislación sobre esa materia, sin relajar los estándares ambientes, debe ser revisada, con el propósito que el esfuerzo que despliegan las compañías del sector por avanzar en sus cierres progresivos, sea debidamente reconocido por la autoridad competente.En ese marco, con el fin de analizar los desafíos y oportunidades que constituyen tanto la transformación de pasivos ambientales en activos como el cierre de minas, el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú y el Capítulo de Ingeniería de Minas del Consejo Departamental de Lima del Colegio de Ingenieros del Perú, estamos organizando un simposio internacional los días 19 y 20 del presente mes.La idea es, en base a la experiencia nacional y extranjera, formular propuestas concretas para viabilizar ambas actividades, lo que estamos convencidos redundará en mejorar la reputación del sector minero en su conjunto y ofrecer innovadoras oportunidades de desarrollo sostenible en las zonas que tuvieron y cuentan actualmente con operaciones mineras de la gran, mediana y hasta pequeña minería.El Director