En el Encuentro Minero que organiza el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, el supervisor de Infraestructura de Redes de Compañía Minera Antapaccay, Edwin Manchego destacó el avance que han logrado en infraestructura tecnológica, la superación de desafíos de conectividad y la transformación digital.Sostuvo que como parte del plan estratégico de la empresa han implementado tecnologías como la Long Term Evolution (LTE), que es un estándar para comunicaciones inalámbricas de transmisión de data de alta velocidad para teléfonos móviles y terminales de datos.Asimismo, destacó la adopción de medidas de ciberseguridad para proteger la infraestructura contra posibles ataques y el enfoque en la conectividad, subrayando la importancia de contar con tecnologías para asegurar una operación ininterrumpida.De otro lado, informó que han desarrollado proyectos exitosos como el sistema antifatiga implementado en los camiones, el sistema anticolisión que advierte sobre posibles choques entre equipos móviles, y el sistema de despacho que optimiza la gestión de la flota.Igualmente, el sistema MEMS4, que permite monitorear en tiempo real la presión y temperatura de neumáticos, la geolocalización de algún corte en las llantas, la identificación de pendientes y velocidades mediante mapas de calor y contar con un plan de mantenimiento focalizado de vías.Entre los desafíos futuros en la transformación digital, manifestó que incluyen mantener capas de conectividad apropiadas y profundizar en ciberseguridad, en la medida que es una actividad dinámica en constante evolución. “Nuestro desafío desde este año al 2032 es seguir contando con capas de conectividad apropiadas y asegurar la operación ininterrumpida para lo que tenemos que seguir trabajando en la ciberseguridad, de tal manera que podamos minimizar los ataques, tener una buena arquitectura de conectividad y trabajar con un modelo que nos permita llevar a cabo y cumplir los objetivos estratégicos”, detalló. En otro momento, indicó que Compañía Minera Antapaccay puso en marcha la planta de óxidos en Espinar (Cusco), un proyecto que inició en 2012 y que ahora se materializa en la producción de cátodos adicionales a los concentrados de cobre.