Por: Claudia Del Pozo, TechnoServe; Rose Mary Vera, Anglo American y Mario Huapaya, Banco Interamericano de Desarrollo.ResumenEl presente informe técnico, busca mostrar el impacto positivo que genera el trabajo articulado con todo el ecosistema que un programa social involucra. Enmarcamos este documento en la presentación del programa Moquegua Emerge, cuyo éxito se viene dando de la mano de las instituciones involucradas, tanto públicas, privadas y organizaciones sociales. Mostraremos con ejemplos, el diseño y puesta en marcha de la metodología propuesta y el camino que se está siguiendo para asegurar la sostenibilidad del impacto a largo plazo. Las conclusiones nos llevan a repensar la forma en la que se viene diseñando y ejecutando diversos programas sociales, de forma un tanto aislada o sin llegar a generar la sostenibilidad que tanto se espera.IntroducciónEl sector minero contribuye de manera significativa en la economía del país y sus grandes inversiones influyen directamente en las condiciones socioeconómicas locales1. Asimismo, las empresas mineras tienen la capacidad de fomentar acuerdos de largo plazo con organismos multilaterales, sector privado, sector público y el tercer sector, con el fin de potenciar sus proyectos sociales. Las inversiones estratégicas permiten a las comunidades locales beneficiarse directa e indirectamente de las operaciones mineras, reduciendo así la posibilidad de conflicto y sus múltiples costos, y contribuyendo al desarrollo de comunidades prósperas.Con el propósito de validar la hipótesis de que la colaboración entre diversos actores multiplica el impacto de los proyectos de desarrollo económico local impulsados por la minería y su sostenibilidad, se estableció un convenio tripartito público-privado entre Anglo American, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la organización internacional sin fines de lucro TechnoServe. El resultado de esta colaboración fue la creación del proyecto "Más allá de la extracción: oportunidades económicas en comunidades mineras". La primera fase de la iniciativa se llevó a cabo entre 2017-2020, logrando la creación de 1,007 empleos y un aumento de 36% en las ventas de 402 empresas involucradas. Dado el éxito obtenido y las lecciones aprendidas de esta intervención multiactor, se implementó una segunda fase de “Más allá de la extracción II” desde 2021, promovida localmente como "Moquegua Emerge". Este proyecto, con un presupuesto de US$ 2.15 millones, busca un desarrollo socioeconómico inclusivo y sostenible en las comunidades dentro del área de influencia de Anglo American, atendiendo los problemas de empleo y desarrollo empresarial de la región. En Moquegua, al igual que en muchas otras regiones mineras, los miembros de la comunidad tienen la expectativa de trabajar en la mina o proveerle a la misma. Sin embargo, lo que la industria puede adquirir y contratar localmente se ve limitado principalmente por las capacidades locales. En ese sentido, la región tiene un escaso desarrollo a nivel de empresas, solo un 3% de su estructura empresarial son Pymes y a esto se suma una capacidad gubernamental local y prestación de servicios limitados (capacitación, financiamiento y mercadeo). A nivel de empleo, el principal problema que enfrenta Moquegua, además de la informalidad presente a nivel nacional, es la inadecuación laboral2. Esto se acrecienta en jóvenes, especialmente en aquellos con educación técnica, donde el 76% está inadecuadamente empleado. Este contexto genera una sensación de poca satisfacción laboral, que sumada al contexto empresarial, incrementa la presión sobre la compañía minera y el riesgo de conflictos. Por tal motivo, y buscando una iniciativa sostenible, replicable e innovadora que aporte al cumplimiento del ODS 8 “Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo para todos pleno y productivo y el trabajo decente”, nació Moquegua Emerge.El diseño del programa se basa en tres pilares: desarrollo de la fuerza laboral juvenil, implementación de la cadena de valor de la gran minería y gestión del conocimiento para influenciar políticas públicas, que se complementan con dos enfoques transversales: la promoción de la equidad de género y un monitoreo, evaluación y aprendizaje constantes. El diseño tiene como eje transversal el fortalecimiento e involucramiento de los ecosistemas de empleabilidad y proveeduría local, con el objetivo de establecer las bases para la sostenibilidad del impacto del programa a largo plazo.La estrategia aplicada se presenta en la Figura 1.ObjetivosEl presente informe técnico tiene por objetivo proponer una metodología de implementación de programas de desarrollo económico integrales, bajo un mecanismo de trabajo articulado entre el sector público, el privado y la sociedad civil que garantice un mayor impacto, alcance y sostenibilidad de la intervención.Desarrollo y colección de datosProblema generalEn el Perú, la minería se presenta como una de las principales actividades generadoras de ingresos, directos e indirectos de la economía y es la segunda actividad en aporte al valor actual bruto (VAB) en la región Moquegua. La manufactura representa el 43.4% del VAB, pero incluye un alto peso de la refinación de productos mineros, y la minería significa 27.7% del VAB (Departamento de estudios económicos, Banco Central de Reserva del Perú, 2022). Esta participación se vuelve aún más relevante si consideramos que la demanda del sector minero también impulsa diversos sectores de la economía como la manufactura, la construcción y los servicios, entre otros.Se conoce que el total de empresas activas en Moquegua asciende a 14,436 al 2018, de estas, 96.8% son microempresas (13,966), 3% son pequeñas empresas (436) y tan solo el 0.2% son medianas y grandes empresas (34), (INEI, 2018). A la estructura empresarial de la región, se suma un limitado acceso a servicios de capacitación y financiamiento, así como a nuevos mercados, lo que usualmente limita la oportunidad del sector empresarial en Moquegua para obtener beneficios económicos que resultan de las operaciones extractivas locales, regionales y macro regionales.En Moquegua, donde el desarrollo empresarial es limitado, las oportunidades de empleo que se generan no van acorde a la oferta de profesionales regionales. Como resultado, los jóvenes pueden tener dificultades para encontrar empleos que se ajusten a sus habilidades, lo que contribuye a la inadecuación laboral. La población joven3 en la región asciende a 40,046 personas, de las cuales se conoce que 21,500 son jóvenes ocupados4, y de estos el 60% en promedio se encuentra inadecuadamente empleado. Es decir, entre el 2018 y 2021, seis de cada 10 jóvenes ocupados, no trabajaron en un puesto relacionado a la carrera que estudiaron. "Este problema se acrecienta en los jóvenes, especialmente en aquellos con educación técnica, donde el 76% de ellos está inadecuadamente empleado; mientras que la inadecuación en los que tienen universitaria completa llega al 55%"5 Como resultado, los jóvenes pueden verse obligados a aceptar trabajos informales o a migrar a otras ciudades con mayores oportunidades, lo que agrava el porcentaje de inadecuación laboral y dificulta el desarrollo empresarial local.Es así que el problema de la inadecuación laboral juvenil en Moquegua y el poco desarrollo empresarial están interconectados. La falta de oportunidades laborales acordes a las competencias de los jóvenes, las limitaciones en el desarrollo de habilidades empresariales, las dificultades para el empleo formal y el menor dinamismo económico son factores que se refuerzan mutuamente, generando un ciclo que dificulta tanto el empleo adecuado para jóvenes como el desarrollo empresarial en la región.Problemas específicosPara desarrollar una intervención que genere un impacto positivo en la región, se debe conocer las causas específicas de la falta de acceso a nuevos mercados del sector Pyme y de la inadecuación laboral de los jóvenes egresados de institutos de educación superior tecnológicos públicos. Por ese motivo, el programa desarrolló diagnósticos a una muestra de empresas y jóvenes de ambas poblaciones.Los problemas identificados para el sector empresarial Pyme son:1) El 80% de las empresas no tienen un responsable especializado en el área de Gestión comercial y prospección de clientes, no se encuentran suscritos en portales de licitaciones, y solo acceden a oportunidades por invitación y/o referencia.2) Más del 80% de las empresas tienen deficiencias en las herramientas de promoción física y digital.3) El 90% no conoce su propuesta de valor. No evalúan su posicionamiento comercial, tampoco definen su diferenciación sobre la competencia.4) El 100% de las empresas exponen tener dificultad para encontrar personal especializado (mano de obra calificada para los servicios que exigen sus contratantes).Por otro lado, las principales causas de la inadecuación laboral, identificadas por el programa, son:ν Falta de vínculo entre la oferta laboral y la demanda de las empresas.ν Ausencia de oportunidades para conseguir prácticas laborales en las carreras que se ofertan en la región.ν La prioridad del egresado de institutos públicos de educación superior tecnológica (IEST) en la región es seguir estudiando para lograr su bachiller universitario.Se evidenció que existe una alta tasa de intención de migración en la población de estudiantes y egresados de los IEST públicos. Específicamente, 85% de ellos busca migrar a regiones como Arequipa (66%), Tacna (54%), Lima (26%) y Puno (11%). Además, se conoce que, al culminar sus estudios superiores, el 81% tiene como objetivo principal seguir estudiando y no necesariamente trabajar. En específico se conoce que al egresar de los IEST públicos, el 59% busca estudiar una carrera profesional, el 26% convalidar sus estudios técnicos para continuar la carrera universitaria y el 15% realizar una especialidad (Programa Moquegua Emerge, 2022).Los resultados de nuestros diagnósticos permitieron identificar que si se potencia las áreas comerciales de las empresas (Pyme), así como las habilidades de empleabilidad de los jóvenes y se desarrollan actividades de vinculación entre el sector empresarial y la oferta educativa, se logrará incrementar los beneficios socioeconómicos de la población.Adicionalmente, nuestra intervención contribuye a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Principalmente al ODS 8: Trabajo decente y crecimiento económico, con dos de sus metas en específico: 8.3 Promover políticas orientadas al desarrollo que apoyen las actividades productivas, la creación de puestos de trabajo decentes, el emprendimiento, la creatividad y la innovación, y fomentar la formalización y el crecimiento de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas, incluso mediante el acceso a servicios financieros y 8.6 Reducir considerablemente la proporción de jóvenes que no están empleados y no cursan estudios ni reciben capacitación, (United Nations Development Programme, 2016).Presentación y discusión de resultadosDiseño e implementaciónCon el objetivo de mejorar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas (Pyme) y fomentar su integración en la cadena de suministro de la industria minera en el clúster minero sur, se implementó el programa Moquegua Emerge que busca fortalecer en el empresario las habilidades de gestión, estándares técnicos y de seguridad, acceso a nuevos mercados y a financiamiento. Como resultado de este proyecto, se espera que 75 Pyme de la región Moquegua sean fortalecidas y establezcan vínculos con la cadena de proveedores de empresas de mediana y gran envergadura en el sector minero.Este logro, a su vez, demandará más y mejores oportunidades de empleo para la región, que debe encontrarse preparada tanto técnica como personalmente. Es por ello. que el programa Moquegua Emerge también busca fortalecer las competencias de empleabilidad en jóvenes de toda la región, de modo que logren conseguir un empleo adecuado.Nada de esto generaría un impacto sostenible a largo plazo, si no se trabaja de forma articulada con los diversos actores del ecosistema. Para ello, el programa busca fortalecer el interrelacionamiento en espacios de trabajo, donde cada actor sea conciente y lleve a la acción, las iniciativas que se generen en el proceso.Específicamente se busca:ν Promover en las empresas participantes la incorporación de mejoras a nivel de gestión, de modo que alcancen niveles de calidad y productividad necesarios para establecer relaciones de proveeduría con medianas y grandes empresas.ν Ampliar y diversificar el portafolio de clientes de las Pyme participantes, a modo de reducir sus niveles de dependencia en un solo cliente y lograr una adecuada inserción en los mercados, generando oportunidades de crecimiento tanto para las empresas como para los profesionales de la región.ν Facilitar el acceso a financiamiento (capital de trabajo u otras actividades).La metodología aplicada consiste en identificar las principales brechas que tiene la empresa a través de un diagnóstico, para luego formular un plan de mejora personalizado que ayude a fortalecer los procesos de gestión comercial, el acceso a financiamiento y la prospección de clientes.Para seleccionar a las empresas Pyme beneficiarias, se desarrolló un estudio de los rubros con mayor proyección de crecimiento en la región y, con ello, se inició un proceso de convocatoria y selección, siendo los sectores atendidos: transporte, construcción, metalmecánica, reparación de maquinaria y equipos. Las empresas beneficiarias recibieron capacitación en temas de: 1) Gestión comercial, 2) Licitaciones y homologaciones, 3) Gestión financiera y 4) Gestión estratégica y talento humano, durante 10 meses de intervención bajo la metodología de asesoramiento especializado.Los principales resultados durante nuestra fase de intervención fueron:ν Incremento de ventas en un 31% (comparación con Declaración Anual 2019 vs 2022) representado un valor de S/ 96’361,919, principalmente en los sectores de transporte de carga y construcción.ν Un total de 1,137 empleos fortalecidos (personas empleadas por empresas proveedoras de Anglo American).ν ocho empresas homologadas con certificaciones ISO y nueve asesoradas para el proceso de evaluación.ν 18 empresas con acceso a nuevos mercados o clientes, con contratos que ascienden a S/ 24’683.574.46.Con el propósito de impulsar la empleabilidad juvenil en la región y fortalecer el ecosistema laboral, el programa Moquegua Emerge tiene como objetivo fortalecer competencias en empleabilidad para que los jóvenes puedan acceder a mejores oportunidades de trabajo. Además, se busca profesionalizar y establecer vínculos entre los actores del ecosistema laboral, con el fin de facilitar la conexión entre la oferta y la demanda de empleo a nivel local.La metodología de empleabilidad consiste en mentorías personalizadas, talleres grupales, acompañamiento en la búsqueda continua de ofertas laborales acorde a los estudios de los jóvenes participantes. Además, se ha generado una Red Emerge Alumni, conformada por egresados del programa. Esta busca darle sostenibilidad a través del involucramiento de líderes de la red en espacios de trabajo con todo el ecosistema y sean quienes logren seguir implementando acciones a favor de la empleabilidad juvenil en la región.Para seleccionar al beneficiario y generar el mayor impacto en la reducción de la inadecuación laboral, se realiza un proceso de convocatoria a jóvenes estudiantes y egresados de educación superior, en el rango de edades 18 a 35 años, que se encuentren en la búsqueda de empleo.Desde el inicio del programa, se vienen logrando los siguientes resultados:ν Un total de 653 jóvenes de la región con competencias de empleabilidad fortalecidas.ν Otros 583 jóvenes adoptaron nuevas habilidades y herramientas para la búsqueda de empleo.ν Uno de cada cuatro egresados del programa mejoró sus condiciones de empleo e incrementó sus ingresos en casi 50% durante los seis primeros meses post egreso del programa.Para garantizar la sostenibilidad de esta intervención, se realizó la firma de un convenio marco con la Dirección Regional de Educación de Moquegua y convenios específicos para trabajar de manera articulada con las Unidades de Bienestar y Empleabilidad (UBE) de los institutos públicos de educación superior tecnológica José Carlos Mariátegui, Luis E. Valcárcel, De los Andes y Centro de Formación Agrícola Moquegua para realizar una transferencia de metodología en beneficio de los jóvenes estudiantes y egresados.Con el propósito de establecer una conexión entre la oferta y la demanda laboral entre el sector empresarial y las instituciones educativas tecnológicas públicas, se está brindando apoyo para la creación de convenios marco interinstitucionales (IEST - empresas). Estos acuerdos tienen como objetivo aumentar las oportunidades laborales de jóvenes estudiantes y graduados a través de la realización de prácticas pre y profesionales, lo que les permite adquirir experiencia laboral de valor. Al cierre de este informe, contamos con siete convenios firmados entre los institutos y las empresas.Adicionalmente, para generar un espacio de diálogo, trabajo y aprendizaje, se organizó y ejecutó la primera Convención Nacional de Empleabilidad Juvenil, encuentro organizado por TechnoServe en conjunto con el Gobierno Regional de Moquegua, BID y Anglo American Quellaveco, que reunió a las principales instituciones veedoras y tomadoras de decisiones de la empleabilidad de la región y especialistas de alcance nacional. Se logró identificar las brechas más relevantes de la empleabilidad juvenil nacional y en Moquegua:Brecha principal 1: no existe un espacio de interacción entre todos los actores del ecosistema (instituciones educativas, sector empresarial, actores públicos, organizaciones sociales y juveniles) que permita dinamizar los cambios en torno a la empleabilidad de la región.Brecha principal 2: no hay un acuerdo estratégico entre instituciones educativas - empresa para incrementar la participación empresarial en las mallas curriculares.Asimismo, se generaron compromisos de trabajo en:ν Aclarar y definir los roles de cada actor en el abordaje de la problemática de la empleabilidad juvenil, según la función y capacidades.ν Involucramiento de representantes de cada actor (privado y público, sociedad civil y tercer sector) en el desarrollo de los programas, de modo que estos prioricen intervenciones de mayor impacto.ν Promoción de la oficina de apoyo al empleo local, donde hay requerimientos de las empresas de la región.ν Adaptar la currícula de la educación básica y la educación superior, articulada a la necesidad de la demanda.ν Flexibilizar el sistema de prácticas, que sea menos burocrático.Para velar por el cumplimiento de los compromisos se conversó en este primer acercamiento, con actores relevantes por cada sector para la conformación del Comité de Empleabilidad Juvenil Regional, que asegurará el desarrollo de una agenda de trabajo en torno a estos compromisos y su seguimiento.Conclusiones1. Únicamente las empresas mineras no pueden lograr el objetivo. La creación de un desarrollo económico local sostenible en las regiones donde existen operaciones, implica aprovechar las grandes inversiones que genera este sector, con el fin de crear economías prósperas y diversificadas, que van más allá de las oportunidades relacionadas con la extracción. Esto requiere de una visión sistémica y del trabajo con un grupo más amplio de organizaciones clave, tanto públicas como privadas. Es fundamental fomentar la colaboración entre el sector público, el privado, las organizaciones de la sociedad civil y las instituciones educativas para abordar de manera integral estos problemas y promover un desarrollo empresarial sostenible en las regiones.2. Construir o fortalecer un ecosistema requiere de tiempo. Un ecosistema sólido y funcional es fundamental para la sostenibilidad del impacto de un programa, y construir uno requiere de años de trabajo articulado.3. Trabajar con el ecosistema requiere agilidad y flexibilidad. Mapear a los agentes clave y facilitar las conexiones a diferentes niveles, es una tarea continua. Los ecosistemas viven y cambian constantemente. Por lo tanto, el éxito de un programa va acorde con estos cambios y la capacidad de adaptarse al ecosistema.4. El enfoque en un mercado más amplio es un factor clave. Para evitar la dependencia excesiva en la cadena de valor de la minería, un ecosistema comprometido debe identificar las oportunidades económicas existentes y potenciales y trabajar para capturar mercados diversificados en el contexto local y aledaño.5. Es indispensable iniciar todo proyecto con un diagnóstico. El diseño de un programa de desarrollo económico debe estar basado en una comprensión profunda de las oportunidades de mercado (lado de la demanda), el contexto socioeconómico y la interconexión del ecosistema (lado de la oferta) para fomentar un enfoque más inclusivo, sostenible y rentable. Se debe hacer del diagnóstico un proceso participativo. Involucrar a los actores clave del ecosistema, (es decir, del sector público y privado –como los gobiernos y las asociaciones– que tienen una influencia directa en el sector, el mercado o el problema), comenzando desde la etapa de diagnóstico para que: (1) todas las voces y partes se tomen en cuenta, (2) considerar diferentes perspectivas sobre la oferta y la demanda, 3) las intervenciones reflejen la realidad, y (4) los actores del ecosistema tengan un sentido de propiedad, tanto del proceso como de los resultados.6. Sistematizar la intervención a través de agendas de aprendizaje y rutas que influyan en el cambio de políticas públicas. A través de diversos espacios, el sector educativo local necesita normas que faciliten la adaptación de mallas curriculares acordes a la demanda laboral.7. Es importante que los proyectos de desarrollo cuenten con un enfoque de construcción de ecosistemas. Se debe analizar el ecosistema de apoyo (mapear los actores del ecosistema) y estudiar las necesidades y las brechas a cabalidad. Para ello, es necesario: i) seleccionar puntos de intervención factibles y de mayor impacto, ii) asegurar la aceptación de los actores y co-desarrollar la asociación, iii) transferir habilidades (según sea necesario), iv) construir vínculos y asociaciones (según sea necesario), y v) apoyar las estrategias de sostenibilidad (según sea necesario).BibliografíaBanco Central de Reserva del Perú. 2022. Departamento de estudios económicos. Obtenido de: https://www.bcrp.gob.peFranks, Daniel & Rachel Davis 2014. Costos del conflicto empresa-comunidad en el sector extractivo: iniciativa de responsabilidad social corporativa en el Colegio Kennedy de Harvard.INEI. 2018. Perú: Estructura Empresarial por Segmento Nacional. Obtenido de: https://www.inei.gob.peMinedu. 2019. Optimización de la oferta educativa de la educación superior tecnológica pública al 2021, Lima.Programa Moquegua Emerge. 2022. Agenda de Aprendizaje. Moquegua.TechnoServe. 2020. Más allá de la extracción: Oportunidades económicas para las comunidades mineras. Estudio de Caso Regional sobre un Programa de Desarrollo Económico Local, realizado en Brasil, Chile y Perú (2016-2020).Unated Nations Development Programme. 2016. UNDP. Obtenido de: https://www.undp.orgVideosLos videos del programa podemos encontrarlos en los siguientes enlaces.ν Programa Moquegua Emerge https://drive.google.com/file/d/1bb5pkQg BowxTlwcOAkJ9GFWue3V- HLqM/view?usp=sharingν Encuentro Red Emerge Alumni https://drive.google.com/file/d/1uLvlfLmy 2eOJL5iqvLW5PcDSD0JG-wJ7/view?usp=drive_linkν Testimonios de empleabilidad https://drive.google.com/file/d/1pyVMW BejsuPG30PsjFD- aEUPONV_h_eT/view?usp=drive_link1 El reporte “Anuario Minero 2021” del Ministerio de Energía y Minas, muestra que al cierre de ese año, la actividad minera generó de manera directa un empleo promedio de 227,635 trabajadores, lo cual significó un incremento del 30.8% en referencia al promedio anual del 2020, la que es la mayor cifra histórica alcanzada en el Perú. Se estima que la actividad minera generó 1’821,080 empleos indirectos, que sumados a los directos se logra que la minería brinde alrededor de 2’048,715 oportunidades de trabajo. 2 En Perú se definen como trabajadores cuya ocupación no es adecuada respecto a las horas trabajadas (menos de 35 horas a la semana) o el ingreso percibido (labora 35 o más horas semanales, pero su ingreso mensual es menor al ingreso mínimo).3 Joven: persona con rango de edad de 18 a 35 años4 Población ocupada: conjunto de todas las personas que, contando con la edad mínima especificada, 14 y más años de edad, durante el periodo de referencia, se encontraban realizando algún trabajo.5 https://gestion.pe/economia/management- empleo/seis-10-jovenes-estudio-mtpe-252187- noticia/