Con una inversión de US$ 2,460 millones y una capacidad de procesamiento de 95,000 tpd para producir concentrados de cobre y molibdeno, BHP inauguró una planta de procesamiento en la mina Spence, que le permitirá ampliar su vida útil por 50 años.

El proyecto, que implicó la contratación de 12 mil trabajadores, forma parte de un plan global de BHP que busca reforzar el portafolio de cobre, fortaleciendo las operaciones de la compañía en Chile para responder a la demanda mundial del metal que se duplicará en las próximas décadas.

“Este es un momento significativo para BHP en Chile, donde estamos desde hace más de 30 años y queremos seguir en este camino de desarrollo conjunto y colaboración. Este país tiene grandes oportunidades para proporcionar los productos básicos que el mundo necesita para descarbonizarse y mejorar los niveles de vida”, expresó el CEO de la empresa, Mike Henry.  

Por su parte, el subsecretario de Minería, Willy Kracht ratificó el compromiso del gobierno chileno en crear las condiciones para un desarrollo armónico de la actividad minera, que permita seguir aportando los minerales necesarios para avanzar en la transición energética mundial.