Por: MBA Andrés Recalde Vega. Mining for the Common Good Toronto, Canadá.

Resumen

Los proyectos mineros siempre han encontrado en los temas sociales un área no tan fácil de manejar. Es así, que el riesgo social se ha convertido en uno de los principales factores de éxito o fracaso en un proyecto minero. Mientras que las variables técnicas y financieras pueden ser controladas con cierta objetividad, el factor social no lo es. Hasta el riesgo ambiental puede ser manejado de acuerdo a un adecuado plan de mitigación de impacto. Las familias, comunidades y gobiernos locales en la zona de influencia, son actores primordiales que deben ser parte de un cuidadoso proceso de relacionamiento y acuerdos. Estos acuerdos deben ser de mutuo beneficio. El modelo de impacto beneficios es una propuesta de metodología practicada en Canadá desde la década de los 70s. Se basa en lograr un consenso entre la empresa minera y las comunidades impactadas social y económicamente por un nuevo proyecto. Se entiende mejor como un paralelo entre la mitigación de impactos ambientales. Los impactos ambientales pueden ser identificados en base a métodos científicos y probabilísticos. En forma paralela, los impactos sociales y económicos a las poblaciones son altamente subjetivos. Esa subjetividad puede reducirse mediante un contrato consensuado que enumere los impactos y los beneficios en contraprestación. Este contrato debe resultar de un proceso de relacionamiento que no sea casual y de corto plazo. Es así que los Acuerdos Impacto Beneficio (AIB) son planeados, discutidos y acordados con un enfoque metodológico. Esta metodología debe guiar el relacionamiento y al mismo tiempo controlar expectativas, mitigar el impacto social y lograr consenso para la operación. La firma de una AIB debe ser el inicio de una licencia social para operar de un proyecto minero. Esta LSO debe considerarse un activo intangible del proyecto. Su aplicación correcta debe resultar en beneficios mutuos para todos los actores y prevenir la aparición de conflicto social. De esta forma, se completaría la viabilidad técnica, financiera, ambiental y social de un proyecto.