Por: Sociedad de Comercio Exterior del Perú. La minería metálica registró su peor resultado en dos años: cayó 8.1% en junio, de acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas (Minem). ¿Qué está detrás de este resultado y qué amenazas enfrentaría el sector en los próximos meses?El resultado negativo se explica por la menor producción de nuestros principales metales. Concretamente, el cobre disminuyó un 11.7% en junio, con relación al mismo mes de 2023. La contracción más importante se concentró en la unidad Toromocho, operada por Minera Chinalco, en Junín. Aquí, la producción cayó un 60.6%, y pasó de tener una participación del 8.6% al 3.8% en la producción total del mineral. Otras unidades afectadas fueron Antapaccay (-40.2%; participación del 6% al 4.1%) de Glencore en Cusco, y Quellaveco (-17%; del 11.7% al 11%) de Anglo American, en Moquegua.El oro también fue afectado, con una contracción del 2.5% en junio. Esto se explicó por la menor producción acumulada de 43 minas pertenecientes al régimen general y de 188 pequeños productores, que representan el 41.9% de la producción aurífera, según cifras del Minem. Este grupo se concentra principalmente en los departamentos de Madre de Dios, Arequipa y Puno, y presentó una disminución del 19.4%. Además, 33 productores cesaron sus operaciones con respecto al mismo mes del año previo. Otros minerales que presentaron variaciones importantes fueron el zinc (-20.9%), hierro (-14.7%) y molibdeno (+24.6%).De enero a junio, el sector minero logró un aumento del 2.4%. Es decir, el crecimiento que se había logrado hasta mayo (4.6%) se redujo a poco más de la mitad en este último mes. El producto que más contribuyó a este incremento durante la primera mitad del año fue el oro, que creció un 14%, gracias a la mayor producción de empresas como Boroo Misquichilca (+164.3%); Paltarumi, que inicio operaciones este año, y Yanacocha (+40%). Otros productos que sostuvieron este resultado fueron la plata (+10.1%), el plomo (+9.7%) y el hierro (+4.7%), según el Minem.En lo que respecta a las exportaciones mineras, estas ascendieron a US$ 21,062 millones durante el primer semestre de 2024, lo que representa el 63.7% del total exportado. Esto equivale a un crecimiento del 11.7% en relación con el mismo periodo del año anterior. El resultado se explica principalmente por los mayores envíos de oro al exterior, que alcanzaron los US$ 5,744 millones entre enero y junio, traducido en un crecimiento del 51.9% comparado con el mismo periodo del año previo. Cabe recalcar que, si no fuera por este mineral, los envíos al exterior habrían crecido solamente un 1.6%, de acuerdo con datos de la Sunat.En cuanto a las inversiones en el sector minero, estas alcanzaron los US$ 378 millones en junio, un 1.5% menos con respecto a junio de 2023. Sin embargo, la acumulada de enero-junio alcanzó los US$ 2,119 millones, con un crecimiento del 10% respecto de enero-junio de 2023. Este aumento se explica, principalmente, por la mayor inversión en equipamiento minero, que en dicho periodo alcanzó los US$ 394 millones (+37%), y el rubro “Otros”, con US$ 246 millones (+72.8%), según el Minem.Pese a los resultados mixtos, el sector tiene claras oportunidades para el crecimiento, debido a los mejores precios de los metales en la actualidad y en el futuro cercano, como señala el Banco Central de Reserva del Perú. Un precio más favorable se traduce en una mayor incursión en actividades mineras. Lamentablemente, esta influencia también incentiva la minería ilegal, la cual, al día de hoy, genera pérdidas por S/ 23,760 millones entre perjuicios ambientales, fiscales y pérdidas de productividad, según estimaciones de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE). Asimismo, normalizar la actividad ilegal desde lo político sería parte fundamental del problema, de acuerdo con el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).No podemos permitir el ponernos trabas a nosotros mismos en cuanto a este tema y considerar propuestas como otra ampliación del plazo de vigencia del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo). Esta y otras mociones que atenten contra la lucha contra la minería ilegal deberían quedar desechadas a la brevedad, ya que perpetúan la competencia desleal, desincentivan la inversión privada y debilitan el crecimiento del sector, como señalan varios especialistas, entre ellos el vocero del Observatorio contra la Minería Ilegal, Manuel Zapata.Es necesario que el sector minero en el Perú se adapte a las fluctuaciones del mercado global y se sobreponga a las adversidades internas. Las políticas públicas deben enfocarse en fortalecer la competitividad del sector, promover la inversión privada y garantizar un entorno de operaciones seguro y regulado que permita un crecimiento sostenible en el tiempo. Hoy por hoy, necesitamos un impulso para revitalizar el sector que más potencial tiene de ayudarnos a crecer como país.